Las familias que experimentan crisis o dificultades extremas pueden tener dificultades para cuidar adecuadamente a sus hijos. Trabajamos con las familias y las comunidades para ayudarlos a desarrollar sus capacidades a fin de que los niños estén bien cuidados y las familias permanezcan unidas.
Previniendo la ruptura familiar Todos los niños tienen derecho a crecer en una familia amorosa, preferiblemente con uno o ambos padres. Sin embargo, a veces los padres no pueden cuidar solos a sus hijos. Las razones por las cuales las familias participan en el fortalecimiento de la familia SOS incluyen dificultades económicas, la muerte de uno o ambos padres y las relaciones inestables de los padres. La ausencia de una familia estable y protectora expone a los niños a múltiples factores de riesgo y los hace vulnerables a la negligencia, el abuso, la discriminación y la explotación.
Aldeas Infantiles SOS trabaja para ayudar a las familias a permanecer juntas a través de más de 550 programas de fortalecimiento familiar. En todo el mundo, tomamos medidas directas para fortalecer a las familias y las comunidades para que puedan cuidar adecuadamente a sus hijos. Algunas de las formas en que ayudamos: Coaching en habilidades de crianza y de gestión del hogar Asesoramiento familiar para resolver problemas Acceso a servicios de salud para niños y madres lactantes Acceso a la educación para niñas y niños, incluidos los aranceles escolares, los uniformes escolares, los materiales de aprendizaje, la tutoría y la ayuda después de la escuela Entrenando y equipando a los padres para obtener un ingreso y crear un hogar estable
Cada niño y cada familia es parte de una comunidad. Trabajamos con socios para desarrollar sistemas sólidos de apoyo social para que los niños y las familias desarrollen, crezcan y aprendan en un ambiente positivo y de apoyo. Nuestros aliados incluyen organizaciones comunitarias, autoridades locales y gobiernos. Juntos construimos resiliencia en familias vulnerables. En 2016, Aldeas Infantiles SOS ayudó a más de 490,000 personas, o 90,000 familias, a través de 550 programas de fortalecimiento familiar en todo el mundo.