Desde su inicio en 1993, han sido muchas las historias que se han registrado; historias que comenzaron con una dura realidad de desamparo en la que llegaron muchos de los niños y niñas, y que luego del proceso de reintegración y gracias al amor que brindan las Madres SOS, ahora se han resumido en historias de felicidad, y éxito afectivo y profesional.
“El tiempo ha pasado muy rápido, todavía recuerdo a mis hijos cuando por primera vez los tuve en mis brazos, recién nacidos, todos completamente indefensos y dependientes de nosotras”, manifiesta Luz Marina Quispe López, una de las Mamás SOS, fundadora de la Aldea y ahora orgullosa madre de jóvenes profesionales.
En la ceremonia se rindió homenaje a la Virgen María Auxiliadora, con diversas danzas folklóricas, y sirvió de marco para reconocer a quienes como la mamá Luz Marina otorgaron 20 años de sus vidas a cuidar, educar, proteger y formar en valores a las niñas y niños. Entre ellas, las madres Valentina Huamaní Quispe, Melania Motta Zevallos y la asistente administrativa Mary Carrasco Cáceres.
Los miembros del Comité de Apoyo, también participaron, entre ellos la Lic. Silvia Uscamayta Otárola, primera regidora de la Municipalidad Provincial del Cusco, comprometida con la causa y con quien se encaminan proyectos de ayuda para la organización que actualmente atiende a un centenar de niños en el Programa de Acogimiento Familiar y más de un millar en el de Fortalecimiento Familiar y Desarrollo de Comunidades.
Cabe señalar, que este último programa trabaja directamente con familias de origen que viven en los sectores más necesitados de la ciudad, capacitándolas y empoderándolas; propiciando así el desarrollo de las mismas, sus comunidades y de la sociedad en general.
Miguel Arévalo Angeles, director de la Aldea Infantil SOS Cusco, aprovechó la oportunidad para agradecer el apoyo que en la actualidad brindan a la organización, instituciones públicas y privadas quienes actualmente asumen un rol protagónico en el mantenimiento de los programas en beneficio de más niñas y niños cusqueños.