La legislación establece las siguientes pautas para la disposición de bienes en un testamento, sin perjudicar a otros herederos:
1. Si el testador tiene hijos, otros descendientes o cónyuge, puede disponer libremente hasta un tercio (33%) de sus bienes a un legatario designado en el testamento.
2. Si el testador solo tiene padres u otros ascendientes como herederos, puede disponer libremente hasta la mitad (50%) de sus bienes.
3. En el caso de que el testador no tenga hijos, otros descendientes, padres, otros ascendientes ni cónyuge, tiene la libertad de disponer de la totalidad (100%) de sus bienes.
Estas disposiciones legales permiten al testador tomar decisiones sobre la distribución de sus bienes sin afectar los derechos de otros herederos según su relación de parentesco.